Sabemos que la situación actual del planeta arroja nuevos desafíos en nuestros modos de vida a lo largo y ancho del mundo. Con el consumo de recursos naturales en exceso, ha sido necesario implementar nuevas estrategias para moderar su uso y prácticamente todas las organizaciones sociales se han sumado a la iniciativa. El Colegio Viktor Frankl asume este reto y nos sumamos también al cuidado del medio ambiente.
Los cambios que actualmente vemos en el medio ambiente son resultado de procesos que se han mantenido durante generaciones, por eso es necesaria una nueva visión ante el mundo material que nos rodea. Es evidente que ahora más que nunca es necesaria una educación ambiental basada en iniciativas que todas las generaciones puedan llevar a cabo, incluso los más pequeños.
Ya que el crecimiento en valores es parte fundamental de nuestros propósitos, el respeto hacia los seres vivos y el espacio en el que todos convivimos es vital. En el Colegio queremos que los estudiantes comprendan la importancia de preservar los recursos que nos ayudan a desarrollar nuestras actividades con suma responsabilidad.
La Inteligencia Naturalista
Como sabemos, los adultos jugamos un papel importante al educar a un niño de hoy; seremos nosotros en quienes se apoyará su educación, basada en modelos anteriores que tienen diferencias con los retos venideros, incluyendo el cuidado del medio ambiente. Por esta razón, la educación en el Colegio Viktor Frankl se ajusta a las exigencias del siglo XXI.
Howard Gardner, psicólogo e investigador de la Universidad de Harvard y autor del libro Frames of Mind: The Theory of Multiple Intelligences, ubica la inteligencia naturalista como una de las inteligencias que los seres humanos poseemos, algunas desarrolladas a lo largo de nuestra vida en mayor o menor medida a comparación de las otras. Esta inteligencia abarca todo lo relacionado con el interés por el medio ambiente, las plantas y los animales.
La inteligencia naturalista ha sido una de las menos atendidas en el medio educativo en otros tiempos, situación que es imperativa de cambiar en aras de dejar este planeta en buenas condiciones para nuestros niños y jóvenes. Para fomentar buenas prácticas de cuidado del medio ambiente tanto en la institución como en casa, nuestros hijos pueden seguir pasos puntuales como:
Ahorro de energía eléctrica y agua
Llevar el agua y la energía eléctrica a muchas comunidades supone el uso de recursos humanos y económicos, además de tomarla de ecosistemas naturales, como el caso del agua. Hacer uso desmedido de estas fuentes nos lleva a adentrarnos en un ciclo de superproducción, por lo que cerrar llaves o desactivar apagadores cuando no se usen nos puede ayudar a resarcir esos impactos.
Ahorro de Papel
Relacionado con el agua se encuentra el proceso de producción de papel, en el que intervienen grandes cantidades de ella. Aunque si bien ya recurrimos mucho al formato digital, en su educación, nuestros pequeños siguen usando mucho este útil escolar, por lo que hay que enseñarlos a moderarlo.
Colocar la basura en el lugar indicado
La contaminación en calles y paisajes naturales es una de las imágenes que nos llegan primero cuando hablamos del cuidado del medio ambiente. Un proceso de recolección de basura con fallas o la falta de sensibilidad en el tema puede llevarnos a contaminar. Los niños deben conocer los botes de basura y saber que los residuos que generan se depositan en estos lugares.
Separar los residuos
Así como es importante depositar la basura en su sitio, lo es también que sepan cómo hacerlo. No todos los tipos de basura deben ir en un solo lugar. Existen clasificaciones para cada tipo y lo ideal es que los estudiantes aprendan desde niños para facilitar los procesos de descomposición de los objetos.
Cuidar las plantas y los animales
Es uno de los principales y mejores consejos que se le puede dar a un pequeño o joven porque afianza también su inteligencia emocional. Durante algunas etapas de la vida no somos conscientes cuánto daño podemos hacer sin la sensibilidad hacia otros seres vivos. El respeto es clave en la convivencia con los demás, incluyendo nuestro ecosistema.
Otras recomendaciones que te damos en el Colegio Viktor Frankl para enseñarles más a tus hijos sobre el cuidado del medio ambiente son reducir el uso de sustancias químicas nocivas, como aerosoles, y optar por materiales reciclados que no generen impacto nocivo, como el uso de popotes y cubiertos reutilizables.
Fomentar estos valores de respeto y cuidado del medio ambiente desde casa y la escuela nos ayuda a que los pequeños los pongan en práctica en cualquier entorno y situación a los que se trasladen, logrando así que aprendan que todos nos beneficiamos y convivimos de mejor manera en este mundo que algún día estará en sus manos.
Estos puntos clave te ayudarán a saber cómo tu hijo puede cuidar del medio ambiente. ¿Te gustaría saber cómo comparar colegios para detectar ventajas y desventajas en su aprendizaje? Haz clic en el botón y recibe toda la información.